El turismo sostenible, responsable o ecoturismo sigue una serie de principios de sostenibilidad y de ética para minimizar el impacto negativo que tienen nuestras actividades en el medio ambiente y cultura local. Para que funcione, es necesario contar con la implicación de los turistas, las autoridades y los establecimientos locales.
La principal finalidad de este tipo de turismo es la conservación de los paisajes y monumentos locales. Es fácil de llevar a cabo, ya que consiste en cambiar algunos hábitos que tenemos por otros más sostenibles. Por ejemplo, en vez de imprimir tus billetes y reservas de hoteles, puedes utilizar la versión digital. Estarás ahorrando papel y contribuyendo a la conservación del medio ambiente. Pero, hay muchas otras cosas que podemos hacer para ser turistas responsables.Beneficios del ecoturismo
El turismo sostenible aporta muchos beneficios para los turistas, la comunidad local y el medio ambiente.
- Preserva el ecosistema: este tipo de turismo implica respetar la naturaleza y los animales y contribuir a su conservación.
- Promueve la economía local: una de las principales características del turismo responsable es comprar en pequeños comercios locales en vez de en grandes cadenas. De esa forma, ayudamos a que la economía del lugar de destino prospere.
- Reducción de la contaminación: esta práctica busca reducir las emisiones de gases contaminantes. Una forma de hacerlo es utilizando fuentes de energía renovable.
¿Qué puedes hacer para ser un turista responsable?
Hay muchas acciones que puedes hacer para contribuir con la sostenibilidad. Algunas son muy sencillas y no te costará mucho esfuerzo ponerlas en práctica.
- Alojamientos sostenibles: el primer paso es alojarte en un local que comparta esa responsabilidad con el medio ambiente. Hay muchas formas de que un alojamiento sea sostenible, por ejemplo, reduciendo el consumo de agua o utilizando energías limpias.
- Transporte eficiente: al llegar a tu destino, elige medios de transporte que contaminen muy poco o nada. Puedes desplazarte andando, en bicicleta o en transportes eléctricos.
- Respeta la flora y la fauna locales: este punto es importantísimo, porque la finalidad del turismo sostenible es justamente la preservación del ecosistema local. No tires papeles, basura ni otros objetos al suelo. Tampoco arranques flores ni plantas autóctonas. Haz lo mismo con los animales, evitando ir a zoológicos donde no estén en libertad. Por supuesto, no realices actividades como la caza ilegal.
- Ahorra papel: no imprimas billetes y reservas. Da preferencia a la versión digital, siempre y cuando esté disponible y se pueda utilizar.
- Reduce el consumo de energía y agua: muchos turistas derrochan agua y energía en los alojamientos con la excusa de que han pagado por ello. Pero, este comportamiento es poco responsable con el medio ambiente. Apaga las luces, calefacción y aire acondicionado cuando no los utilices. Cierra el grifo y la ducha cuando no vayas a usarlos.
- Contribuye con la economía local: compra en tiendas pequeñas, come en restaurantes locales y alójate en hoteles locales. Intenta causar el menor impacto posible en la comunidad, respetando sus costumbres, cultura y religión.
Post en colaboración con Bwelltrip