Las rutas por montaña son una actividad cada vez más popular. Por eso hoy quiero mostrarte 10 tips muy fáciles que puedes aplicar para llevar la comida sin plástico a tus rutas por la montaña.
En un mundo en el que dentro de poco habrá más plástico que peces en el océano (en peso) a veces resulta complicado ver que existen otras alternativas al plástico. Por eso quiero mostrarte varias opciones para que puedas reducir el plástico o incluso eliminarlo de tus salidas a la naturaleza.
Cuando vamos a la montaña lo más habitual es llevar agua, una comida principal y luego algunos alimentos extras para ir reponiendo energía a medida que vamos caminando.
Para cada uno de estos grupos existen alternativas sin plásticos que podemos conseguir a granel haciendo que nuestras salidas a la montaña sean todavía más sostenibles.
10 tips para llevar la comida sin plástico cuando vamos de ruta por montaña
Para que te resulte más fácil he agrupado los tips en base a estas tres categorías:
- Comida principal.
- Comida extra.
- Hidratación.
ADVERTENCIA : no tengo nada en contra del plástico y cuando me refiero al plástico, me estoy refiriendo al plástico de un solo uso. El plástico me parece un material genial pero que se ha extendido su uso en algunos casos de manera inadecuada.
Tips comida principal
Dentro de las comidas principales que se prestan a llevar en una mochila tenemos:
- Bocadillos.
- Ensaladas.
¡Veamos los primeros tips!
1. Envoltorios para bocadillo reutilizables.
Utilizar el film transparente o el papel de aluminio es lo más habitual. No obstante, no es lo más ecológico: son difíciles de reutilizar y reciclar.
Por esta razón, te propongo que si quieres llevar un bocadillo utilices alguna de las siguientes opciones:
- Envoltorios reutilizables. Por ejemplo, los que ofrece Boc’n’Roll.
- Bolsas de silicona, como las de Stasher. Al ser bolsas que están selladas, te garantizas que no va a terminar la mochila pringada si se sale el relleno de bocadillo. Las hay de varios tamaños para elegir la que mejor se ajuste a tus bocadillos.
- Telas enceradas. No me parecen la mejor opción, pero son la opción más ligera y que menos ocupará en tu mochila. Eso sí, asegúrate de que es lo suficientemente grande para cubrir todo el bocadillo con facilidad.
Si quieres descubrir más alternativas al film transparente para casa, aquí te dejo un artículo que te puede interesar.
2. Ensaladas sin plásticos de un solo uso
Las ensaladas son mis favoritas para ir a la montaña. Me permiten hacer combinaciones que considero más nutritivas.
Cuando hablo de ensalada no te imagines la típica ensalada de lechuga, tomate y cebolla. ¡No, por dios! Hay vida más allá de eso 😉
En mis primeros años como senderista, compraba unas ensaladas en bote que la única ventaja era que eran muy prácticas. Pero, no estaban tan ricas como las que yo me preparo, eran bastante más caras y además en casa salida que hacía generaba bastante basura plástica: unos cubiertos y un envase.
Desde que empecé a preparar mis propias ensaladas y descubrir sus ventajas no he vuelto más comida enlatada. Aprender a cocinar de manera saludable me ha traído muchas ventajas y disfrutar más de la comida es una de ellas.
La mejor noticia es que si quieres no vas a necesitar nada que seguramente no tengas ya: un bote de cristal reutilizado y un tenedor (de los que usas para comer).
Ahora te voy a dar más opciones para que puedas elegir lo que mejor te vaya.
El bote de cristal lo puedes sustituir por cualquier otro tipo de envase. Te pongo tres ejemplos:
- Táper de plástico reutilizable. Para comida fría son una buena alternativa y que son más ligeros que el cristal y no tienes el riesgo de que se te rompa. Eso sí, fíjate que el tipo de plástico sea el PP 5, es el más seguro. Si quieres saber más sobres los plásticos mira este artículo que está muy completo.
- Fiambrera de acero inoxidable. Son otra opción muy interesante: ligeras, fáciles de limpiar, reutilizables y no se rompen fácil. El único inconveniente, que a diferencia del bote de cristal reutilizado lo normal es que las tengas que comprar.
- Táper de vidrio. Ahora ya puedes encontrar versiones totalmente de vidrio y herméticas, por lo que no tendrás problema de guardar la comida caliente en ellos. Los inconvenientes, el peso y que se pueden romper.
3. Cómo llevar la ensalada para que dure más tiempo en perfecto estado
Colocar de manera estratégica los ingredientes en tu recipiente hará que puedas disfrutar de ensaladas completas como recién hechas.
Para eso, empieza por el aliño y termina por las hojas verdes y semillas. En el centro irán las verduras, los hidratos de carbono y las proteínas.
Así es cómo quedaría:
Los alimentos consistentes pueden ser verduras y/o hortalizas duras: calabaza, calabacín, pimiento, chucrut…
Para los hidratos de carbono puedes llevar arroz, pasta, patatas…
En la capa de las proteínas yo empleo lentejas o garbanzos cocidos. Pero también podrías meter huevo o algún tipo de carne.
A continuación, unas hojas verdes, lo más separadas del aliño para que estén frescas. Puede ser cualquier tipo de lechuga, canónigos, rúcula, hojas de mostaza…
Terminamos la ensalada con unas semillas o frutos secos, mejor si están activadas (remojadas en agua). Yo también suelo meter algunas uvas pasas, me encanta encontrar un punto dulce en alguno de los bocados.
4. Cubiertos reutilizables
Puedes comprar unos cubiertos de bambú, pero: ¿por qué no llevar los que usas a diario?
Las cucharillas o tenedores pequeños de acero inoxidable también son una buena opción y pueden ocupar algo menos en la mochila.
Incluso existen otras maderas más locales que sirven a la perfección y además podemos con ellas estar fomentando el comercio local.
Tips comida extra
Existen cientos de comidas que se pueden llevar para ir reponiendo energía durante una ruta de montaña.
Hay opciones para nada recomendables, como chocolatinas, patatitas fritas o golosinas.
También te puedes encontrar barritas o geles con decenas de ingredientes que en algunos casos no son muy saludables.
En cambio, te voy a proponer opciones que puedes conseguir a granel, mucho más saludables y que puedes tener ya en la despensa.
5. Lleva fruta envuelta con biomateriales
A veces pienso que disfrutamos complicarnos la vida: creamos un problema para luego buscar la solución.
Las frutas de serie vienen protegidas por un “biomaterial” que les sale de manera natural: la piel. ¿Te suena la campaña #DesnudaLaFruta?
Para mi la fruta es un alimento que no puede faltar en cualquier salida a la montaña. Nos hidrata, refresca, carga de vitaminas y nos da energía.
No todas las frutas tienen el mismo aguante a los golpes y por eso hay opciones que resultan más aconsejables.
Aquí te dejo mis preferidas y que son fáciles de conseguir sin plástico:
- Manzanas.
- Naranjas.
- Mandarinas.
- Plátanos no muy maduros (si no quieres comer puré de plátano).
Aunque las puedes meter en una bolsita de tela, yo no me suelo complicar y las llevo junto con el resto de la comida. Que en el tip 9 te cuento cómo lo hago.
6. Frutos secos, frutas secas y frutas escarchadas
En una bolsa porta snacks reutilizables puedes llevar un mix de comida para ir reponiendo durante la caminata.
Los frutos secos son muy interesantes porque aportan grasas e hidratos de carbono complejos y por tanto energía de asimilación lenta.
Las frutas secas o escarchadas. Son lo contrario a los frutos secos: nos aportar energía casi instantánea por estas formadas en gran medida por hidratos de carbono simples.
Esta combinación es muy interesante para que no nos dé una pájara y poder disfrutar de la naturaleza.
Aunque podrías llevarlos separados, al llevarlos juntos vas variando de manera más natural.
Junto con este mix yo algunas veces meto un poco de pan (mejor de masa madre y harina integral) y un poco de chocolate negro.
Tips hidratación
Algo que no puede faltar en la mochila para ir a caminar es agua.
Dependiendo de la estación y la ruta habrá que llevar más o menos, en general con 1-1,5 litros sería suficiente.
7. Botellas reutilizables y no de plástico
Por la montaña muchas veces veo como van las botellas de plástico por fuera de la mochila pegándoles el sol 😭. Si no lo sabes, el calor es lo que hace que el plástico libere al agua tóxicos que luego nos beberemos.
Hoy en día existen muchas opciones de botellas reutilizables. Las que más me gustan son las de acero inoxidable. Por el peso y por la durabilidad.
También, de acero inoxidable hay botellas que conservan el frío y el calor. Son un poco más pesadas y cuesta encontrarlas de 1 litro.
Aunque podrías llevar botellas de vidrio, su peso, el riesgo de caer y quedarse sin agua hace que no me parezcan tan interesantes.
Gracias a las carreras por montaña es fácil de encontrar bidones reutilizables que son muy ligeras y reutilizables. Suelen ser de 500 ml, aunque también las hay de 250 o de 750 ml.
Por último, hay bolsas de hidratación para mayores cantidades de agua que llevas en la mochila y puedes ir bebiendo por un tubo sin necesidad de sacar la botella de la mochila. Estas bolsas son muy cómodas y otra opción a tener en cuenta.
8. Receta para hacer tu propia bebida isotónica sin plástico
Si quieres llevar tu propia bebida isotónica no hace falta que te la compres ya embotellada.
Con zumo de limón, panela (o miel), un poco de sal, bicarbonato y agua te puedes hacer la tuya en un momento.
Aquí te dejo la receta:
- 500 ml de agua.
- Zumo de un limón.
- ½ cucharadita de bicarbonato.
- ½ cucharadita de sal.
- 1 cucharada de panela o miel.
Mezcla todos los ingredientes en tu botella, agita y listo para tomar.
Tips extras
9. Maneras de llevar toda la comida en la mochila
Ahora que ya tenemos toda la comida preparada sin plástico: ¿cómo llevarlo en la mochila?
Podríamos utilizar una bolsa de plástico para llevarlo todo. Si la reutilizamos durante muchas salidas no sería un problema e incluso sería algo beneficioso. Alargar la vida útil de las cosas que ya tenemos es prioritario.
En cambio, si no tienes bolsas de plástico existen otras opciones para llevar la comida sin que se pierda por la mochila.
- Bolsa de tela o “tote bag”. Son ligeras, resistentes, agradables al tacto e incluso bonitas. Lo mismo que con las bolsas de plástico, antes de comprar una bolsa, mira por los cajones a ver si tienes alguna que puedas utilizar para esto.
- Bolsos de neopreno o tela dura. Muy típicas para llevar la comida al trabajo de una manera más sostenible y también muy prácticas para el monte.
10. Vuelve con más de lo que llevaste
Para terminar, te voy a dar un tip extra: cuando vayas a la montaña, intenta volver con algo más de plástico de lo que llevaste.
Lleva tu propia bolsa para recoger las botellas o plásticos que te vayas encontrando en el camino. De esta manera dejarás el entorno más limpio de lo que te lo encontraste.
Y aunque seguirá quedando basura en la naturaleza, tu gesto puede servir para generar consciencia en tu entorno y que cada vez seamos más los que vivimos con menos plástico.
¡Por una montaña y comida libre de plásticos!
Para terminar…
En este artículo he intentado recopilar todos los tips que yo aplico, pero seguro me he dejado cosas fuera de cómo llevar la comida a la montaña sin plástico.
Por eso me gustaría leerte en los comentarios. ¿Me he dejado algo? ¿Hay algo que te gustaría añadir? Cuéntanoslo y así todas podremos aprender algo nuevo.
Espero que te haya resultado útil y te leo en los comentarios.
¡Salud y sostenibilidad!
Nacho Fernández – Inteligencia Eco
