La moda sostenible juega un papel muy importante dentro de la industria textil; y es que este tipo de moda promueve prácticas de producción responsables reduciendo enormemente el impacto ambiental y social que se asocia a la producción masiva de ropa. La moda sostenible, además, fomenta una economía justa y equitativa.
Por este motivo, cada vez es más común encontrarnos con firmas que apuestan por este tipo de prendas, desde aquellas que se encargan de confeccionar prendas como camisetas, vestidos o pantalones hasta las que se centran en la lencería femenina; y es que, además de las evidentes ventajas de la moda sostenible para el planeta, también cuenta con muchas ventajas para las personas que las visten.
Los beneficios de la lencería para mujer sostenible
Cuando usamos ropa interior sostenible, no sólo apostamos por modelos que respetan el planeta, también son mucho más beneficiosos para el cuerpo, para la piel y la salud en general.
La lencería femenina sostenible cuenta con mayor calidad que la que presentan otros tejidos. Recordemos que para que una prenda pueda considerarse sostenible, debe conseguir algunas certificaciones como la certificación GOTS, que garantizan una calidad indiscutible, entre otras cosas, en la prenda. Estas prendas, así, además de ser modelos de lencería elegante, no incluyen químicos, tintes ni otros productos que pudieran dañar las fibras.
La suavidad de esta lencería es también algo a tener en cuenta. Se buscan prendas que sean respetuosas con la dermis, especialmente con aquellas pieles delicadas en zonas tan íntimas. Si no cuenta con añadidos tóxicos, se evitan las posibles irritaciones que se producen con prendas sintéticas.
Además, hay que señalar que estas prendas, fabricadas con materiales orgánicos, cuentan con un nivel de transpiración mayor. Esto es debido a que las fibras naturales siempre serán más transpirables que las sintéticas.
El tejido más sostenible: el algodón
Aunque es posible encontrar muchos tejidos en esto de la lencería para mujeres sostenible, tales como el rayón o el bambú, el algodón es quizá el más demandado.
El algodón ecológico se caracteriza, entre muchas otras cosas, por estar cultivado en campos sin pesticidas ni fertilizantes químicos. Una materia prima que estaría completamente libre de tóxicos y que, por tanto, no perjudican en absoluto las pieles más sensibles.
En este punto, es importante fijarse siempre en aquellas colecciones que ostenten este título de colecciones sostenibles; y es que si bien el algodón se usa en la producción de muchas prendas, no siempre es algodón orgánico.
Un buen ejemplo de moda
Como comentábamos, son muchas las firmas que se decantan por este tipo de colecciones de moda sostenible. Un buen ejemplo es Ysabel Mora, con su colección Lapuresa.
Se trata de una colección de lencería ecológica, sostenible, ética y responsable. Prendas completamente atemporales de lencería elegante que están diseñadas para todas las mujeres.
Lapuresa está confeccionada con algodón que ha sido trabajado por personas con salarios dignos y en condiciones laborales justas y no discriminatorias.
Todos los productos de esta colección aseguran un gran confort gracias a sus tejidos totalmente orgánicos, diseñados bajo los parámetros de bienestar y confort. Evidentemente, estos tejidos no están tratados con tóxicos y están sometidos a unos estrictos controles de calidad.
En resumen, podemos decir que Lapuresa es una colección de bajo impacto que respeta tanto los materiales de producción como el entorno y a las personas que están involucradas en todo el proceso de creación.
Si te ha gustado este post, no te pierdas:
1 Comentario
Interesante articulo de la lenceria organica y sostenible.